La opinión del Portavoz: Sebería de Ortuella

Llevamos décadas sufriendo el olor producido por la Sebería Manuel García Mendoza S.A. y por los camiones que transportan restos animales hasta su planta.

Durante ese tiempo han sido multitud las ocasiones en las que, tanto desde el Ayuntamiento de Ortuella como desde el Departamento de Sanidad del Gobierno Vasco, se han mantenido reuniones con los representantes de la empresa, remitido escritos y realizado visitas a la planta para comprobar que los procesos productivos y los medios empleados son los establecidos por las normativas vigentes, sin embargo, esas reuniones y visitas han demostrado servir más bien de poco. Las emisiones de malos olores no sólo no se han reducido, sino que últimamente han aumentado considerablemente. Esto demuestra que, o las medidas correctoras no son suficientes, o no se utilizan correctamente.

En el Grupo Municipal Socialista de Ortuella creemos que nuestra responsabilidad para con nuestras vecinas y vecinos no debe limitarse a que se cumpla la legislación medioambiental. Creemos que debemos velar también por la calidad de vida y por el confort de nuestros conciudadanos y es precisamente en este tema en el que la actividad de la Sebería choca con los intereses de nuestro Municipio.

Ya en 2008, durante el desarrollo del Avance del Plan General de Ordenación Urbana, propusimos que se dejase la Sebería fuera de ordenación como herramienta de presión por parte del Ayuntamiento de Ortuella. Pero como el PGOU sigue estancado no se ha podido seguir adelante con nuestra iniciativa.

En numerosas comisiones de Urbanismo y Medio Ambiente se ha comentado de manera superficial el cambio de ubicación, proponiéndose incluso un posible traslado a la nueva fase del Polígono Abra Industrial, pero no tenemos claro que esa alternativa solucione el problema al cien por cien.

Además, somos conscientes de que una iniciativa como ésta de poco sirve si se queda como mera anécdota en un Pleno o una Comisión del Ayuntamiento o en una reunión con la dirección de la Sebería y no se consigue implicar a los Ayuntamientos vecinos y a otras instituciones como la Diputación Foral de Bizkaia y el Gobierno Vasco para buscar alternativas, e incluso a la propia Ertzaintza para que se controle que los camiones que transportan los restos animales lo hagan en las debidas condiciones higiénico-sanitarias evitando los malos olores y el vertido de residuos a la calzada.

 Facebook de Oscar Salicio Rego